sábado, junio 24, 2006

Para aquellos que se empecinan todavía en una visión romántica de la Guerra Civil en la que se enfrentaron los defensores de la democracia contra los fascistas sirva este párrafo extraido del libro que presentamos: "De hecho, lo que había ocurrido en España no era una mera guerra civil, sino el comienzo de una revolución. Ésta es la situación que la prensa antifascista fuera de España ha tratado de ocultar. Toda la lucha fue reducida a una cuestión de "fascismo frente a democracia", y el aspecto revolucionario se silenció hasta donde fue posible".Orwell describe en este libro sus vivencias como combatiente en la Guerra Civil española, engrosando las filas del POUM. Luchará en el frente de Aragón donde una bala le alcanzó en el cuello y sobrevivió de puro milagro. Después, por ser militante del POUM sufrirá la persecución por parte de los estalinistas del PSUC. "Haber luchado en la milicia del POUM bastaba para terminar en la cárcel". Desencantado, no tiene más remedio que huir de España, atravesando la frontera como simple turista.

9 Comments:

Blogger Músic-comunicador said...

A pesar de las críticas que se puedan verter sobre el bando republicano, la realidad de la Guerra civil española no deja de ser la de un grupo de militares sublevados que se levantan en armas contra el gobierno legítimo de España. La república no dejaba de ser, a pesar de sus errores, un gobierno democrático. El franquismo fue una etapa con un gobierno totalitario donde se privaron todas las libertades y se llevó a cabo un proceso de extorsión de la población. Eso, en ningún caso, se puede disculpar ni poner en duda. También, los pro-americanos, se deberían preguntar qué pasó para que, igual que se terminó con Hitler y con Mussolini, no se hiciera lo propio con Franco. A aquellos que defienden el supuesto "progreso" de los pantanos, que sepan ver que, nuestra diferencia con el resto de Europa radica en que, por no haber sido una democracia, no recibimos esa tan paternal ayuda americana.

25 junio, 2006 17:08  
Blogger Jesús Palomar said...

Un saludo Pensador. Y una pregunta. Es que no me queda del todo claro al leer tu texto: ¿Hubieses estado de acuerdo con la intervención de EE.UU en España para eliminar al dictador Franco? Si tu respuesta es sí, me gustaría saber tu opinión sobre la intervención de EE.UU en Irak. Gracias anticipadas, y hasta pronto.

25 junio, 2006 18:09  
Blogger El Filósofo Impaciente said...

Ilustre pensador:
Cuando hablas de que el franquismo fue un gobierno totalitario en donde se privaron todas las libertades y se llevó a cabo un proceso de extorsión de la población, me parece que utilizas conceptos equivocados. El meollo está en el concepto totalitario. Si lees a Sartori, el famoso politólogo italiano, verás que de totalitario sólo califica a aquel régimen que lo controla todo. El estado controla la totalidad. Que no deja ningún margen para la libertad. Nada. De ahí que se denomine totalitario. Un ejemplo sería el estado estalinista. Ni siquiera el nazi -en el que había algún atisbo de libertad económica, por ejempo- es, rigurosamente hablando, totalitario.
Si cambias ese concepto por el de autoritario o dictatorial, estaríamos de acuerdo. A pesar de los pesares, mi querido pensador, la dictadura de Franco permitía cotas de libertad inimaginables en el sistema estalinista, en donde sí que fue real un proceso de extorsión y masacre de la población. Echa un vistazo a las declaraciones de Solzhenitsyn en España, cuando en plena dictadura franquista viene a presentar su Archipiélago Gulag.
También deberías reflexionar sobre el motivo por el que las democracias europeas dieron la espalda a la República en la Guerra Civil. Una vez empezada la contienda, ninguno de los dos bandos tenía en mente instaurar una democracia en España. La de Franco la conocemos y la padecimos. La otra no, aunque imagino cómo podría haber sido.
Jesús Palomar te ha lanzado un órdago con su pregunta. Espero con ansia tu respuesta.
Por cierto, pensador, gracias por poner un enlace de mi blog en el tuyo.
Un saludo para ti y para el filósofo del palomar.

25 junio, 2006 19:32  
Blogger Músic-comunicador said...

Procedo a la réplica de sus comentarios. Estimado señor Palomar, en mis palabras no afirmo estar de acuerdo con dicha intervención. Solo digo que los pro-americanos deberían reflexionar ya que, si piensan que EE.UU. salvó al mundo de la tiranía del mal, no hizo lo propio con España. En la intervención de Irak me manifesté absolutamente en contra. Se trataba de eliminar la dictadura "huseina" para imponer otra mercantilista.

Estimado señor filósofo impaciente, pido disculpas por la confusión del término. Era autoritario lo que quería expresar. Desconozco la historia de las declaraciones de Solzhenitsyn pero agradecería que pusiese otros ejemplos más claros donde se vislumbrara más claramente esas cotas de libertad que yo no recuerdo haber leído en ninguna parte.

Claro está que la ayuda que se negó a la república vino motivada por evitar el enfado de Hitler y fue una bajada más de pantalones que hicieron los estados europeos de la época (al menos, así lo entiendo yo). La república tuvo numerosos errores y sería mentir no reconocerlos. Yo creo que, en el caso de no haber sido derrotada, la influencia del resto de europa, la normalización de la situación interna y el progreso que hubo en las décadas posteriores hubieran posibilitado un establecimiento de libertades mucho más amplio, muchísimo antes en el tiempo que en el caso del franquismo y haber evitado al país tan traumáticos procesos.

Un saludo, queridos contertulios. Nos seguimos leyendo

29 junio, 2006 15:36  
Blogger Músic-comunicador said...

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29 junio, 2006 15:36  
Blogger El Filósofo Impaciente said...

Solzhenitsyn dijo: “Sus progresistas llaman dictadura al régimen vigente en España. Hace diez días que yo viajo por España y me he quedado asombrado. ¿Saben ustedes lo que es una dictadura? He aquí algunos ejemplos de lo que he visto. Los españoles son absolutamente libres de residir en cualquier parte y de trasladarse a cualquier parte de España. Nosotros, los soviéticos, no podemos hacerlo. Estamos amarrados a nuestro lugar de residencia por la propiska (registro policial). Las autoridades deciden si tengo derecho a marcharme de tal o cual población. También he podido comprobar que los españoles pueden salir libremente de su país para ir al extranjero. Sin duda saben ustedes que, debido a las fuertes presiones ejercidas por la opinión mundial y por los Estados Unidos, se ha dejado salir de la Unión Soviética, con no pocas dificultades, a cierto número de judíos. Pero los judíos restantes y las personas de otras nacionalidades no pueden marchar al extranjero. En nuestro país estamos como encarcelados.
“Paseando por Madrid y otras ciudades, he podido ver que se venden en los kioscos los principales periódicos extranjeros. ¡Me pareció increíble! Si en la Unión Soviética se vendiesen libremente periódicos extranjeros, se verían inmediatamente decenas y decenas de manos tendidas y luchando por procurárselos. También he observado que en España uno puede utilizar libremente las máquinas fotocopiadoras. Cualquier individuo puede hacer fotocopiar cualquier documento, depositando cinco pesetas por copia en el aparato. Ningún ciudadano de la Unión Soviética podría hacer una cosa así. Cualquiera que emplee máquinas fotocopiadoras, salvo por necesidades de servicio y por orden superior, es acusado de actividades contrarrevolucionarias.
“En su país –dentro de ciertos límites, es cierto– se toleran las huelgas. En el nuestro, y en los sesenta años de existencia del socialismo, jamás se autorizó una sola huelga. Los que participaron en los movimientos huelguísticos de los primeros años de poder soviético fueron acribillados por ráfagas de ametralladoras, pese a que sólo reclamaban mejores condiciones de trabajo. Si nosotros gozásemos de la libertad de que ustedes disfrutan aquí, nos quedaríamos boquiabiertos. Hace poco han tenido ustedes una amnistía. La califican de “limitada”. Se ha rebajado la mitad de la pena a los combatientes políticos que habían luchado con armas en la mano (alude a los terroristas). ¡Ojalá a nosotros nos hubiesen concedido, una sola vez en veinte años, una amnistía limitada como la suya! Entramos en la cárcel para morir en ella. Muy pocos hemos salido de ella para contarlo”.
Fue durante la visita a España en marzo de 1976, todavía en plena dictadura franquista, a pesar de que Franco hubiera muerto hacía unos pocos meses.
Nótese también que las cotas de libertad a las que se alude son comparadas con la Unión Soviética. De cualquier manera, parece que no hay color, ¿no?


Por otro lado, no está nada claro que la ayuda que se negó a la República viniera motivada, como dices, por evitar el enfado de Hitler y fue una bajada más de pantalones que hicieron los estados europeos de la época. Sencillamente de debió a que las democracias francesa y británica no se fiaban de la República por su deriva revolucionaria y pro soviética.
En cuanto a lo que hubiera ocurrido de haber ganado la guerra la República es entrar en el terreno de la política-ficción. ¿Cómo hubieran reaccionado las democracias occidentales teniendo un satélite de la URSS en la Península Ibérica? ¿Hubiera llegado antes del 75 la democracia? Te recuerdo que el muro cayó bastantes años después.
Saludos y seguiremos debatiendo. Así aprendemos todos.

29 junio, 2006 21:55  
Blogger Jesús Palomar said...

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01 julio, 2006 03:20  
Blogger Jesús Palomar said...

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03 julio, 2006 00:39  
Blogger Jesús Palomar said...

Estimado Pensador. Noto en su réplica cierta evasión en lo que es el núcleo central de la argumentación. Nadie en este debate se ha declarado pronorteamericano ni antinorteamericano, creo. No considero pertinente pues aquella observación. Es decir, no añade ni quita nada a lo fundamental. Vayamos al grano, o a los grano, pues hay al menos dos. Entiendo que mi estimado adversario dialéctico, el señor Pensador, no es partidario de la intervención de un Estado soberano en otro Estado soberano. Prima pues el principio de respeto a la independencia sobre otros principios (quizá justicia, libertad, humanitarismo, etc). Entiendo entonces que no fue partidario de la intervención de EE.UU. en Irak. Tampoco, consecuentemente, de la posible intervención de otras potencias para eliminar a Franco e instaurar una democracia en los años 40, por ejemplo. Entiendo, igualmente, que no sería partidario de la intervención de EE.UU en la Alemania Nazi, gracias a la cual fueron liberados muchos judíos de una muerte segura (EE.UU. no ejercía legítima defensa contra Alemania. Si lo hacía contra Japón). Si mantienes esta línea de coherencia no tengo nada que objetar a tu argumentación. Solo que yo cuestiono la mayor y, por ejemplo, sí soy partidario de la intervención de EE.UU. en la Alemania Nazi, por ejemplo. Pero esto nos llevaría un poco más lejos. Tiempo habrá, si el señor Pensador lo considera oportuno, de desarrollar otras líneas argumentales al respecto.
El otro punto que me gustaría matizar es aquello de dictadura mercantilista. Si definimos los términos negro y blanco con similares significados dejan de tener significación ambos. Me explico. En teoría política se intentan definir conceptos. Existen regímenes totalitarios (el Filósofo Impaciente te citó a Sartori muy acertadamente. Yo te recomiendo, además, a Hannah Arendt para entender el concepto). Existen dictaduras fascistas, dictaduras comunistas, dictaduras personalistas sin contenido ideológico. Todas ellas tienen cosas en común. Son liberticidas y la ley se legitima por la fuerza. En el otro lado existen las llamadas democracias social-liberales o liberal-sociales (pueden tener acentuado un aspecto u otro). Resumiendo: independencia de poderes, libertades civiles, participación política, Constitución refrendada por los ciudadanos. Podemos cuestionar si la participación es la más adecuada (sufragio, sistema electoral, listas abiertas, etc.). O si el grado de libertad es satisfactorio. O si la independencia de poderes es total. Pero pretender que EE.UU. no es una democracia, o sugerir que la libertad de mercado (que no es más que una libertad más, y que curiosamente es una condición necesaria aunque no suficiente para que existan las otras) es sinónimo de dictadura, me parece excesivo. No obstante, creo recordar que en Irak ha habido elecciones. También creo que los genocidios de kurdos y de ciertos grupos religiosos han cesado.

03 julio, 2006 00:43  

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